domingo, 18 de diciembre de 2022

MASLOW Y EL 2022


Finaliza el año y es hora de recapitular. Y lo que veo no me desagrada, todo lo contrario. Probablemente, este 2022 haya sido el mejor y más intenso de toda mi trayectoria. Con independencia de muchas causas y de una docena de guardias del Turno de Oficio, que cada día pesan un poco más, he participado en casi una veintena de cursos (el Derecho cambia a diario y es imprescindible estar al día)


He tenido la enorme suerte de impartir un total de 15 cursos en Madrid, Toledo, Ourense, Alcalá de Henares, y Burgos, la mayoría de las veces en Colegios de la Abogacía, repitiendo en la dos últimas ciudades, y, sobretodo, manteniéndome como parte del claustro de profesores del Curso de protección jurídica de las personas con discapacidad que organiza el Consejo General de la Abogacía, del que ya llevamos realizadas 5 ediciones.


Dos publicaciones especializadas han visto la luz con sendos trabajos que llevan mi firma. Y, sobretodo, el apartado de reconocimientos. Ganar por segunda vez los Premios Secciones del ICAM ha sido reconfortante para mi ego profesional, lo reconozco. Pero recibir de mi propio colegio, y con sólo dos días de diferencia, dos diplomas y dos insignias de plata sé que es algo que difícilmente se va a volver a repetir. Según la pirámide de Maslow, en la que se representa la jerarquía de las necesidades humanas, el reconocimiento y el éxito se encuentran casi en su cúspide. Y no me extraña, pues así es como me he sentido, en la cumbre.


Pero lo mejor de todo, sin duda alguna, es haber estado acompañado por mi mi mujer y mi hija en esos momentos. Nada se puede comparar a sus caras de felicidad y creo que también de orgullo.


Veremos qué nos depara el año próximo. En unos días comenzaremos a comprobarlo.





miércoles, 23 de noviembre de 2022

LA LOCURA FORMATIVA SE REPITE

El último trimestre del año suele aglutinar gran cantidad de cursos, jornadas y eventos jurídicos de todo tipo, especialmente los relacionados con la discapacidad, puesto que el día 3 de diciembre se celebra el Día Internacional de las Personas con Discapacidad.


En mi caso, la vorágine comenzó el 17 de octubre. Ese día participé en la jornada sobre el protocolo para la actuación con personas con discapacidad intelectual en el Turno de Oficio, organizada por el ICAM. Junto con mi compañera María Jesús Mauricio González informamos a los compañeros del Turno de Oficio sobre cómo detectar la discapacidad intelectual en las personas a las que asistimos en funciones de guardia y cómo actuar en consecuencia. Más de 100 personas inscritas dan cuenta del interés que despertó la jornada formativa.


Pocos días después, el 25 de octubre, intervine nuevamente en el curso de Protección jurídica de las personas con discapacidad, organizado por el CGAE, impartiendo el módulo de Derecho Penal. Se trataba de la quinta edición del curso, que ha vuelto a registrar un lleno absoluto con 450 inscritos en unas pocas horas. Es un placer comprobar que el interés de los Letrados por el Derecho de la Discapacidad va en aumento día tras día.


Y por último (de momento) ayer día 22 participé nuevamente en la Escuela de familias online, organizada por la Fundación AMAI-TLP, informando a las familias de las personas que presentan un trastorno límite de la personalidad sobre cómo ha quedado el panorama jurídico de la discapacidad tras la entrada en vigor, hace poco más de un año, de la Ley 8/21.


Como siempre, gracias a todos los organizadores y a mis compañeros de aventuras, que me permiten seguir disfrutando de una parte de la profesión tremendamente gratificante.


domingo, 30 de octubre de 2022

IV PREMIO SECCIONES DEL ICAM

El pasado día 27 recibí el IV Premio Secciones en la modalidad de Discapacidad, convocado por el Ilustre Colegio de la Abogacía de Madrid. En esta ocasión, y tras haber ganado la primera edición, no pensaba presentarme. Pero el hombre propone y los hados disponen. Y los hados hicieron confluir en el tiempo dos situaciones concomitantes. No voy a extenderme en ellas, sólo diré que ambas tenían íntima relación con el trastorno límite de la personalidad, un trastorno mental tan desconocido como extendido entre la población mundial. Y eso fue lo que motivó que redactase un trabajo jurídico titulado “La persona con TLP ante el proceso penal”.


El acto de entrega del premio fue tremendamente emotivo. En él, con mi familia presente, intervinieron el Presidente de la Sección de Discapacidad del ICAM, D. Rafael de Lorenzo, y D. Eugenio Ribón, Diputado en funciones de la Junta de Gobierno del ICAM y responsable de las Secciones. Ambos alabaron mi labor, lo que agradezco enormemente.


Además del consabido diploma, recibí varios ejemplares del Anuario de Secciones, elaborado con la totalidad de los trabajos premiados. Esa publicación ya se encuentra en una estantería junto con el resto de los libros que he publicado a lo largo de estos años de ejercicio profesional.


Este año ha sido enormemente gratificante desde el punto de vista profesional, culminando con la entrega de este premio, y tras recibir sendos diplomas e insignias de plata por los 25 años de ejercicio y por la labor desarrollada dentro de la Sección de Discapacidad del ICAM, respectivamente. Difícilmente podré ver repetido un año como este 2022.







sábado, 24 de septiembre de 2022

V EDICIÓN DEL CURSO DE PROTECCIÓN JURÍDICA A PERSONAS CON DISCAPACIDAD

En abril del año pasado publiqué una entrada sobre la I Edición del Curso de Protección Jurídica de las Personas con Discapacidad, que organiza el Consejo General de la Abogacía Española. El próximo día 4 de octubre dará comienzo la quinta edición. En cada una de ellas se han formado 450 Letrados de todo el país, quienes se han inscrito de forma masiva en todas y cada una de las entregas del curso. Tanto es así que las plazas se han agotado en pocas horas.


A lo largo de dos meses 16 ponentes impartiremos nuestras clases sobre todas las ramas jurídicas que abarca lo que ya se puede denominar como Derecho de la Discapacidad, al objeto de que los compañeros adquieran los conocimientos mínimos para el ingreso en el Turno de Oficio especializado que cada colegio de la Abogacía tenga establecido.


Que el Consejo General de la Abogacía siga contando conmigo es algo que llena mi ego como no se pueden ni imaginar, sobretodo dada la calidad profesional y humana del resto de los ponentes. De muchos de ellos ya puedo decir que son grandes amigos, después de haber compartido un buen número de batallas jurídicas.


A los compañeros Letrados les dejo al pie el enlace de acceso a la inscripción del curso por si desean compartir estos dos meses con nosotros. Si así fuere, el día 27 de septiembre (a la vuelta de la esquina) se abren las plazas. Y recuerden que vuelan. Nos vemos online dentro de unos días.


https://www.abogacia.es/formacion/v-curso-proteccion-juridica-de-las-personas-con-discapacidad/

viernes, 22 de julio de 2022

LOS CAMINOS DEL DERECHO...

 

Esta semana hemos repetido formaciones. El martes en el Curso de Acceso al Turno de Oficio de Protección de Víctimas con Discapacidad Intelectual o Enfermedad Mental en el ICAM. Sé que mi amiga María Fuster me va a regañar (por lo de “enfermedad mental”), y con razón. Pero no soy culpable del título. Algún día se cambiará el nombre, espero que pronto. Ya van siete ediciones de este curso, en las que siempre he estado presente. Compartí la tarde con mi amigo y gemelo postizo Carlos Fernández Pascual, ambos bajo la batuta de otro gran amigo, José Ángel López Cabezas. Así da gusto trabajar.


Y el miércoles repetimos el curso sobre la reforma de la legislación civil y procesal en el ámbito de la discapacidad, que tuvo su primera edición en el mes de marzo, organizado por el Ilustre Colegio de Abogados de Alcalá de Henares, en formato telemático. Repetimos todos los ponentes anteriores, coordinados por la Vicedecana del ICAAH Cándida Fernández Bravo (no sean mal pensados, no hay nepotismo).


Y parece que, de momento, se acaba el año judicial. A la vuelta del verano seguiremos impartiendo formación. Y que no falte, pues lo paso enormemente bien, haciendo algo que nunca pasó por mi mente llegar a realizar dentro de la profesión. Pero los caminos del Derecho son inexcrutables. ¿No pensarían que iba a decir “torcidos”, verdad que no?











miércoles, 15 de junio de 2022

BODAS DE PLATA EN EL TEATRO REAL

El pasado mes de enero publiqué una entrada recordando que, 25 años atrás, ingresé en el Ilustre Colegio de Abogados de Madrid. Hace pocas fechas varió su denominación, cumpliendo con los tiempos de inclusión que vivimos, a Ilustre Colegio de la Abogacía de Madrid. Coincidiendo en el tiempo con el cambio de nombre, ha cumplido 425 años de existencia, de los cuales, como he comenzado diciendo, he vivido los últimos 25. Con motivo de esa efemérides, el ICAM ha programado una completa semana de actos conmemorativos, que se inauguraron este lunes. Tras la jura de nuevos Letrados, fuimos convocados los que cumplíamos 25, 50 o 60 años en la corporación. Yo no me lo quise perder, y allí estuve (perdón, no había dicho que el lugar fue el Teatro Real). Y no fui solo, me acompañaron las mujeres de mi vida. No suelo excusarme en este tipo de actos, pues soy un firme defensor de tradiciones y simbología, aunque en esto último me supera el protagonista de El código Da Vinci. De hecho, mi profesión no se explica sin procedimientos, sin “ritos”, los cuales están repletos de símbolos.


Tranquilos, ya dejo de “introducir”. La verdad es que sólo pretendía compartir con vosotros el gran día que fue para mí el 13 de junio de 2.022. Palabras como emotivo, emocionante, conmovedor…, todas ellas serían demasiado parcas para explicar lo que no puedo explicar. Lo diré de otro modo: el día anterior, mi estómago parecía decidido a recordarme los primeros años de ejercicio, cuando antes de cada juicio se revolvía en mi contra. 400 abogados, reunidos en el Teatro Real, acompañados de nuestros amigos y familiares más cercanos, recibiendo elogios y recuerdos del día… Indescriptible


Por fortuna, una imagen vale más que mil palabras. Por tanto, será mejor dejar de escribir y completar esta entrada con algunas fotos, mías (se siente), con mi familia y con algunos amigos con los que coincidí en el acto en cuestión. A partir de ahora, seguiré en la brecha. Es el camino que elegí hace 25 años. O como diría el mandaloriano, éste es el camino. Veremos qué depara el resto de la andadura.










jueves, 5 de mayo de 2022

EL DÍA DE LA CONVENCIÓN DE NUEVA YORK

 

El 3 de mayo, como cada año, volvimos a conmemorar el Día de la Discapacidad en España, pues fue en esa fecha del año 2.004 cuando entró en vigor en nuestro ordenamiento jurídico la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad. La conocida como Convención de Nueva York ha supuesto el hito más importante en el Derecho de la Discapacidad. Norma de carácter internacional, promulga la plena capacidad jurídica de las personas con discapacidad en igualdad de condiciones con las demás personas en todos los aspectos de la vida, como así establece su Art. 12.


El CERMI de Castilla-La Mancha tuvo a bien invitarme a participar ese día en la jornada que se celebró en Toledo para avanzar en el conocimiento de la Ley 8/21, de 2 de junio, por la que se reforma la legislación civil y procesal para el apoyo a las personas con discapacidad en el ejercicio de sus capacidad jurídica. Dicha norma, fruto del desarrollo y aplicación en nuestro país de la Convención de Nueva York, supone la eliminación del panorama judicial de las tutelas e incapacitaciones.


Tuve la oportunidad de compartir el día con auténticos pesos pesados, como el Presidente de la Audiencia Provincial de Toledo o Fernando Santos Urbaneja, fiscal de reconocido prestigio en la materia, así como con 300 personas que asistieron al evento, unos presencial y otros telemáticamente.


Volver a Toledo no me supone trabajo alguno, al contrario. Por mis venas corre sangre toledana y desde muy pequeño he recorrido sus calles y monumentos, por lo que me encuentro casi como en mi propia casa. Y así me hicieron sentir los promotores de la jornada, a los que debo reconocer una perfecta e impecable labor de organización. Volveré pronto, seguro. Mi abuela no me perdonaría que no lo hiciera.






martes, 5 de abril de 2022

UN MES DE LOCURA FORMATIVA

 

En una anterior entrada amenazamos con seguir con la formación. Y así ha sido. En menos de un mes, los colegios de la abogacía de Alcalá de Henares, Burgos y Madrid, el Consejo General de la Abogacía y AMAI-TLP han tenido a bien invitarme a impartir cursos y conferencias relacionados con la discapacidad.


El 10 de marzo estuve disfrutando del magnífico edificio del Siglo XVI, que otrora fuera el Colegio Menor de Teólogos de la Madre de Dios, y que hoy alberga la sede del Ilustre Colegio de Abogados de Alcalá de Henares, junto a la Capilla del Oidor. Fue una magnífica mañana y posterior comida con el resto de ponentes, Decano, Vicedecana y otros miembros de su Junta de Gobierno. Como no podía ser de otro modo, tuvieron que soportarme hablando de la reforma de la legislación civil y procesal en el ámbito de la discapacidad.


El 18 de marzo cambiamos un poco de tercio, por tema y ubicación. En esta ocasión fue el Ilustre Colegio de Abogados de Burgos quien organizó un curso que tuvo lugar en la Fundación Caja de Burgos. Y me correspondió informar de la labor de los Letrados cuando defienden en procesos penales a personas con discapacidad intelectual. No desaproveché el viaje, pues estuve rodeado en la comida posterior de insignes y preclaros juristas que han dedicado gran parte de sus vidas a la defensa de los Derechos de las personas con discapacidad: Carlos Ganzenmüller Roig, Fiscal del Tribunal Supremo; Pepa García Lorente, Letrada y maestra y referente en la materia de varias generaciones de Abogados; Ignacio Sancho Gargallo, Magistrado del Tribunal Supremo; y por supuesto mis queridos amigos y compañeros Manuel Cerezo, Cristina Mozas y Carmen García Luján, sin olvidar a Carlos Fernández Pascual, mi alter ego en la discapacidad.


El 24 de marzo pude participar en la mesa redonda que se organizó alrededor de la presentación del libro del psiquiatra Mario Acevedo Toledo, “La herida límite. El trastorno límite de la personalidad: la enfermedad de nuestro tiempo”, centrando mi intervención en los aspectos penales de dicho trastorno, plasmados en el fenomenal libro, cuya lectura recomiendo tanto a neófitos como a iniciados en la materia. Y por segunda vez compartí mesa con uno de mis maestros en Derecho Penal, Arturo Beltrán, ex Presidente de la Sección Quinta de la Audiencia Provincial de Madrid, quien ahora disfruta de una merecida jubilación tras 48 años de impartir Justicia y enseñanzas.


El día 31 de marzo me correspondió impartir el módulo penal en la IV edición del curso “Protección Jurídica de las personas con discapacidad”, que organiza desde el pasado año el Consejo General de la Abogacía Española. Se trata de un curso que se imparte en formato online, para permitir el acceso a los compañeros de todo el país. Como en ediciones anteriores, las plazas (más de 400) se agotaron en unas pocas horas.


Por último, ayer, día 4 de abril, volví a impartir, con mi querido amigo Carlos Fernández Pascual a la batuta, un curso sobre la Ley 8/21, curso que organizó el Ilustre Colegio de la Abogacía de Madrid. El plantel de lujo lo han compuesto la Notaria Carmen Velasco Ramírez, la Fiscal Rosa Rubio Ramos y las Letradas Ana Marta Almaraz García y Pepa García Lorente. Créanme cuando les digo que junto a ellas uno se siente empequeñecido.


Menos de un mes de locura, de bendita locura, haciendo algo que me apasiona, aunque nunca lo hubiera pensado cuando comencé a estudiar Derecho hace taitantos años.


He preferido dejar para el final el apartado de agradecimientos, pues son muchas las personas a las que debo dirigirlos. Gracias a todos los nombrados y a muchos otros que no he olvidado, pero que engrosan una larga lista en la que no quiero dejar fuera a nadie. Gracias de todo corazón a organizadores, contertulios, compañeros de mesa y mantel, amigos… Gracias. Volveremos a vernos pronto. Y si no, al tiempo.








lunes, 7 de marzo de 2022

CUMPLEAÑOS Y PREMIO A UN GRAN AMIGO

 

Hace unos días fue mi cumpleaños, algo que todos sabéis, pues agendas de móviles y Facebook se encargan de recordarlo. Fue un día más especial de lo habitual. Los hados se confabularon y decidieron que ese mismo día le fuera entregado un merecidísimo reconocimiento a un gran amigo, D. Carlos Ganzenmüller Roig, Fiscal del Tribunal Supremo y artífice de los cambios producidos en la Fiscalía y también (aunque su modestia le impida reconocerlo) en España, en el Derecho de la Discapacidad.


En el acto de entrega estuvimos presentes varios amigos, y con algunos de ellos celebré mi mayoría de edad (¡por fin!) con una comida, algo que llevábamos tiempo esperando largo tiempo, por razones que no creo desconocidas para toda la población.


Como Don Carlos es un caballero de los que ya no quedan, en su discurso de agradecimiento del premio tuvo la deferencia de acordarse de la labor realizada en los últimos tiempos por varios abogados en pro de los derechos de las personas con discapacidad. El caso es que también tuvo una mención para mí. Fue un auténtico regalo de cumpleaños que no esperaba, un regalazo.


Y aquí van unas pocas fotos del acto de entrega del Premio Amigo de las Personas con Discapacidad-Ciudadano CERMI. Si hubiera un premio a los amigos, en general, Don Carlos sería también galardonado.






miércoles, 23 de febrero de 2022

RETOMANDO LA FORMACIÓN

Como cada año, finalizado el mes de enero, se retoman las actividades formativas en colegios de abogados, asociaciones y fundaciones. En los últimos dos días, he tratado de aclarar el nuevo escenario legal de la discapacidad a las familias de personas afectadas por el Trastorno Límite de la Personalidad, agrupadas todas ellas en la Asociación Madrileña de Ayuda e Investigación del Trastorno Límite de la Personalidad (AMAI-TLP), organizadora de lo que se ha dado en llamar Escuela de familias. Desde aquí mi agradecimiento a la asociación por seguir contando conmigo desde hace ya varios años.


Hace unas pocas horas he impartido una clase en el curso sobre discapacidad organizado por el Ilustre Colegio de Abogados de Málaga. Seguimos con la formación online, que sólo me ha permitido ver en dos dimensiones a mis amigos y compañeros del colegio malagueño. Gracias a todos ellos, y en especial a Dolores Campos, Presidenta de la Sección de Diversidad Funcional de dicho colegio. Estar rodeado de amigos, aunque sea en la distancia telemática, no tiene precio.


No hemos hechos más que comenzar. Nos aguardan en las próximas semanas los colegios de abogados de Madrid, Burgos y Alcalá de Henares y el Consejo General de la Abogacía. Por fortuna, algunas de dichas jornadas ya serán en formato presencial.


Nos vemos dentro de poco (aunque sea online)











    

lunes, 17 de enero de 2022

BODAS DE PLATA

 

Hoy, 17 de enero, la Iglesia Católica celebra el día de San Antonio Abad, más conocido como San Antón, patrón de los animales. El martirologio también conmemora, entre otros, a San Mariano mártir. En este momento no hay animales en mi vida a los que homenajear, pero a Mariano sí debo felicitarle desde aquí. Él ya sabe.


    Aunque puede parecer que el inicio de esta entrada no tiene el contenido jurídico que caracteriza a este blog, sólo deben esperar unas pocas líneas para comprobar esa relación. Enseguida me explico.


    Tal y como solía hacer Sophia Petrillo, la decana de las protagonistas de la serie televisiva “Las chicas de oro”, … imaginad: Madrid, año 1997. Un par de amigos han quedado una mañana del mes de enero en la calle Serrano, frente a la entrada del Ilustre Colegio de Abogados de Madrid. Se conocen desde hace 10 años, cuando comenzaron juntos a estudiar en la universidad. Y ahora han decidido iniciar su andadura profesional.


    Desde aquel día han pasado exactamente 25 años, eso que se denomina Bodas de Plata, por extensión de las que los matrimonios celebran. Mi amigo continuó su vida laboral por otros derroteros muy distintos. Por mi parte, aún sigo bregando año tras año, y hoy se cumplen 25, desde aquel día en que ingresé en el Colegio de Abogados junto con mi amigo Julián, quien me acompaña en la foto en el acto de la Jura en el Tribunal Supremo.


    Decir que ha sido difícil llegar hasta aquí sería una obviedad. Ningún trabajo es fácil. Si lo fuera, estoy seguro de que se llamaría de cualquier otra forma y que las élites lo tendrían totalmente acaparado. El paso del tiempo es inexorable, pero lo importante es decidir si se pasa por la vida dejando huella o si nos sentamos a ver las huellas que deja la vida al pasar. Me gustaría pensar que estoy entre los primeros. No concibo mi vida profesional de otro modo.


    Sea como fuere, siempre me he sentido un privilegiado, pues trabajo en lo que me gusta. Y la profesión es tan amplia que permite no aburrirse nunca. Cuando mi hija era pequeña le hice esa pregunta que se les formula a todos los niños: ¿qué quieres ser de mayor? Su respuesta no viene al caso, pero le volví a preguntar si no quería ser abogada, como papi, a lo que me respondió que no, porque era una trabajo muy aburrido. Años más tarde repetí la pregunta, y en esa ocasión la respuesta siguió siendo la misma, pero matizada con un es un trabajo de mucha responsabilidad. Se notaba que no sólo se había hecho mayor, sino que, además, me veía enfrascado en el quehacer diario, ese que nos va minando poco a poco, como la gota que horada la piedra.


    Insisto en que, a pesar de todo, soy un privilegiado. Y espero seguir siéndolo otros 25 años más, en los que espero y deseo que mi familia me siga llamando cariñosamente “Perry”.


    Y como siempre, gracias a las tres personas que han hecho posible mi vida profesional. Gracias siempre.